Rojo atardecer.
Rojo sangre.
Rojo sangre de las moras.
Moras rojas atardecidas en mis labios desmemoriados.
Rojas horas.
Rojas horas sin verbos.
Verbos rojos ,
ejecutados
con un mejor lenguaje que
el de las palabras.
Palabras
rojas de mecánica ondulatoria
alterando el comportamiento de mis átomos.
6 comentarios:
qué lindo que escribis Silvina, tanta fuerza y sensualidad
Hola, Medusa. Con la vista baja (Por las dudas)te digo que me gusta tu blog. Muy buenas imágenes.
Un saludo, amiga.
No me cabe la menor duda Silvina, tu obra merece ser publicada, para que el resto de los mortales podamos descubrir todo este mundo de interiorismos y pasiones que eres capaz de trasladarnos con tanto desarraigo, elegancia y exquisitez. Leerte es la sublimación de la líbido y toda su voluptuosidad hecha palabras. Entra bien, tiene lozanía y te invita a explorar el deseo y humedecer los recuerdos que nunca quisieron irse.
Un beso y un abrazo Silvina.
Muy bueno muchacha nocturna... he quedado convertido en una roca que lee ciega sus palabras. Invitada al Blog del Mercader! Saludos!
Largá la birome y dame un beso bombón !!!!
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