ÁTAME O ESCÚCHAME

Vayámonos los dos
por las calles circulares del purgatorio.
Hoy inauguro mi camino hacia tus manos;
ésas

que pincelan el contorno de mis piernas
con el tacto de tus dedos.
Átame. O escúchame.
No hay treguas posibles. Invítame.
Navégame.
Deslízame sobre tu pecho aderezado con dudas.
Acéptame. Agótame.
Resquebrajemos el silencio
con los sonidos del éxtasis.
Tengo sed.

Déjame tragarte
someterte
transpolarte transportarte

a mis madrugadas oxidadas de lluvia.

ADVERTENCIAS

Soy una mujer de alas nocturnas,

adicta

a las molduras desparejas.
Sueño con maremotos, meteoritos, bengalas,
pedazos de cielo,
revoluciones.
Colecciono azucenas, cuentos de girasoles,
amores imposibles, amores descartables,
palabras gastadas,

palabras no dichas,
pájaros de papel,
miradas bajo la luna
o bajo un paraguas.
Si me atas a soles rutinarios,
de hartazgo
moriré un mediodía.

AMOR TEMPORAL. BREVE. CASUAL. AMOR

parecía simple evitarlo manejarlo contenerlo

prolongarlo discontinuarlo

lo repetía mentalmente frente a sus ojos de almendra

como un rosario un conjuro un estribillo

un salvoconducto

lo repetía como un mantra

amor

temporal breve casual

si dibujaba su nombre

al instante le asestaba

el golpe verdugo del corrector...

borrado aniquilado

enmascarado de blanco

parecía simple hasta ignorarlo

total es un amor al paso

para urgencias temporales

fabricado de llamados casuales

de cepillos de dientes que no rivalizan por la derecha del espejo

o por la izquierda

un amor sin augurios

ni buenos ni malos

ni heridos ni amenazados por la duda

un cantar-de-los-cantares cada diez

o quince días

una vorágine de locura rara vez cada siete

parecía simple anestesiarlo

sin embargo

se apropia de mis trincheras de mis barricadas

de mis puentes levadizos

de mis medidas de seguridad

de mis presumidos aires de indiferencia

me secuestra se enreda se esconde se camufla

me invade a la tarde a la noche a la madrugada

me perturba hackea mi subconciente

elude mis rutinas yse mete donde no lo llaman

a tal punto que yo

amante confesa de los puntos

suspensivos sobre todo y de la coma

del punto y coma

del punto aparte

de los puntos finales

por culpa de un amor infrecuente

breve casual

me olvido de los puntos

de los puntos seguidos

de las comas

de pasar por la tintorería de descongelar el freezzer de encontrarme con viejos amigos de remendar melancolías de subir a bordo en el aeroparque y

ya ni siquiera recuerdo como era yo

antes de este desorden

punto final

TERCERA DESPEDIDA

Es noche y no te extrañes

si abandono el paraíso de cañas suaves

y verdes maizales.

No te extrañes si en mi mediodía

se hace sombra el olvido

abordando este tren de las diez

vestida con tu color preferido.

No te extrañes si hasta ayer tu ternura

me vendaba los ojos y yo mujer

desnuda o enjoyada

con las delicias de tus juegos de amor,

combinaba las caricias fervientes de los vientos del sur,

con las tuyas.

No es casual, no te extrañes

si me subo a este tren de las diez

y si te niego lo que jamás me pides...

Ya sabes no resisto este perfecto clima

de tierra prometida,

este coro de ángeles prusianos,

esta resurrección de rosas amarillas

ni unos ojos azules.

Ni el vino.

Ni el páramo.

Ni el monte florecido.

Ni el cuchillo de caza.

Ni el sexo junto al río.

TOXICOSIS

Tóxicamente. Deliberadamente solitarios

como lobos fundacionales.

Intoxicadamente juntos.

Adictos a las cornisas. A los puentes. A las zonas de riesgo.

A los muelles olvidados.

A las lenguas vampíricas.

A perros noctámbulos.

A fantasmas suicidas.

A cactus puneños.

A calles empinadas o empedradas.

Noches enteras con sus lunas y amaneceres

refugiados en el misticismo.

En la apología del dolor.

O en la lujuria.

Noches enteras adueñándonos recíprocamenmte

de coincidencias geográficas.

Días completos mutando del vegetarianismo

al caníbalismo

a fuerza de morder

bocas

labios

piernas

cuellos

brazos

dedos

sueños.

PALABRAS INICIALES

En las vidas de tales y cuales,
hay noches de querubines y noches de aquelarre,
noches completas y noches a medio hacer,
noches a pura seda y noches a pura hostia.
Quintaesencia de medusa nocturna,
me descalzo y empiezo a transitarlas
como una loba entre las perras.
No llevo atuendo alguno;
sólo unos trozos de papel y un lápiz de cristal...
Espérame...
Ya vuelvo.